Me ha coincidido fuera de Santander el primer corte para la elección de la capital Europea de la Cultura de 2016, y la verdad es que me ha decepcionado un poquito, sinceramente pensaba que este primer corte lo íbamos a pasar, también tenía claro que era imposible, viendo el resto de ciudades candidatas, que nos fueran a dar a nosotros la capitalidad, pero soñar es gratis.
La realidad es que tenía los ojos vendados, siempre me ha gustado ser crítico con las cosas que me rodean, pero esta vez me dejé llevar por un desmedido optimismo, seguramente realzado por el apoyo de la Fundación Botín. Pensé que con el todopoderoso Banco Santander, la cosa iba a resultar muy fácil. Pero me equivoqué…
Acepto mi error, y mi candidez. Hace tiempo, un santanderino buen amigo que vive en tierras francesas me dijo que era imposible que Santander saliera elegida, y simplemente lo basaba en lo que podía ofrecer Santander culturalmente hablando al resto del mundo. En ese momento tuve la osadía de rebatir sus argumentos y creerme el ombligo del mundo.
Ahora lo pienso y la respuesta a esa pregunta de mi amigo es sencilla, nada, absolutamente nada. Esta ciudad hoy por hoy no ofrece, culturalmente hablando, nada al mundo. Ahora creo que hemos cimentado nuestra candidatura a Capital Cultural sobre barro y muy buenas palabras. Me imagino que es fácil apostar a caballo ganador, que ahora que nuestra candidatura huele a fracaso es cómodo hacer leña del árbol caído, pero es que lo pienso y me doy cuenta de lo ingenuo que me han hecho ser, y os aseguro que me da rabia.
Sólo unos ejemplos… Hace como unos 5 años nos quitaron el museo de prehistoria, engañándonos y diciendonos que iban a construir un museo nuevo y moderno para albergar los fondos que tenía el pequeño y vetusto museo de Puertochico. Estamos a 2010 y nadie sabe donde se encuentran esas piezas prehistóricas. El museo seguirá ahí escondido, porque a día de hoy nadie lo ha visto, y nosotros seguimos sin disfrutar de nuestra amplia historia. Eso sí, llevan más de dos años pagando un alquiler indecente en un local enfrente de la universidad, mintiendonos a todos y diciendo que esa es la mejor sede para el museo. Ahora nos quieren volver a engañar diciendo que ya está proyectado el nuevo museo de prehistoria, quizás llegue el Ave antes de ver ese museo construido.
Más ejemplos, hace un par de años, se rehabilito la Plaza Porticada, un lugar querido por los santanderinos, pero sin ningún tipo de estilo arquitectónico, una plaza que no ofrece absolutamente nada artísticamente hablando, quizás dentro de 5 siglos sea una obra majestuosa, pero hoy en día, 60 años después de ser concebida, no deja de ser un lugar digno y bonito para poner una pista de hielo en Navidad o un escenario bonito para la Semana Grande. Pero la cuestión es que cuando se llevó a cabo dicha rehabilitación, se descubrieron unos restos de lo que fue la antigua muralla del puerto de Santander. Sinceramente soy incapaz, porque no tengo datos sobre ello, de saber si esas murallas constituyen un monumento en sí mismas por la antigüedad y lo que representan, pero yo no soy quien debe juzgar eso, tiempo han tenido nuestras autoridades para decidir el futuro de esas murallas, lo que es una auténtica vergüenza es que tengamos una porquería de carpa ahí en medio, que no hace sino estorbar a la gente y dar la sensación de total abandono. Por cierto… una ciudad como Santander, que desgraciadamente no posee vestigio alguno anterior al siglo XIX. Es cierto que la explosión del Machichaco y sobre todo el incendio de Santander, destruyeron todo pasado de esta ciudad, pero por eso mismo, para un resto de muralla que hemos encontrado, tiempo hemos tenido para hacer algo con ella. La única decisión que han tomado nuestros gobernantes ha sido poner una carpa y conseguir que la gente se acostumbre a ver aquello allí.
Llegados a este punto ya somos conscientes del poco atractivo histórico que tiene nuestra ciudad, realmente no tenemos ningún edificio histórico, exceptuando nuestra querida Catedral, gran joya del gótico español (perdonadme la ironía). No tenemos ningún edificio antiguo que ofrecer, aquí quizás Córdoba o Zaragoza nos puedan ganar en la carrera de Capital Cultural. Entonces tendremos que dar un paso adelante y analizar nuestra arquitectura moderna, y nos encontramos con el Palacio de Festivales, una de las obras más importantes del arquitecto Sáenz de Oiza. Si hacemos una encuesta entre los habitantes de Santander y preguntamos lo que les parece el edificio tendríamos una muestra bastante importante de lo estéticamente feo que es. Aun así todo, yo le doy mi voto a favor.
A finales de 1991 nuestros vecinos de Bilbao tuvieron la suerte y el trabajo, y pusieron encima de la mesa lo que hay que poner, cosa que no hicimos nosotros, para instalar en su tierra el Museo Guggenheim. Es cierto, nosotros tuvimos la posibilidad de ponerlo en Santander, pero se conoce que no hicimos las cosas bien, como muchísimas veces más nos ha pasado. La cuestión es que el tren del Guggenheim pasó. En San Sebastián que vieron que la ciudad había que modernizarla hablaron con Rafael Moneo y pensaron en diseñar el Kursaal, una obra grandiosa, tanto en su aspecto exterior, como en su aspecto interior. Y es que en San Sebastián, ciudad con la que muchas veces nos comparamos, tienen tres teatros y 6 museos a 10 minutos del centro de la ciudad. Pero también tienen una infinidad de ciclos y Festivales anuales, sólo nombro el Festival de Cine y el de Jazz. Nosotros tenemos el Palacio de Festivales y… estoy contando los cines y teatros que tenemos en la capital… Me sale uno (el cine Los Ángeles…). Queda todo dicho.
Menos mal que si tienes dinero o alguien que te regale una entrada, quizás puedas asistir a una función del Festival Internacional de Santander.
Nosotros con mucho esfuerzo hicimos el Palacio de Exposiciones, en Bilbao se construyó en BEC (Bilbao Exhibition Centre). Pero es que nosotros somos más pequeños y no necesitamos tanto edificio…
Nuestro tren vuelve a pasar con la idea de la Fundación Botín para crear un espacio en el muelle y conceder al gran arquitecto Renzo Piano la posibilidad de crear un edificio del siglo XXI, a ver si le dejamos, ya que las fuerzas vivas de esta ciudad tan conservadoras ellas, no estarán por la labor de dejar hacer nada que rompa el paisaje idílico de esta ciudad.
Yo me reconozco un amante de la música, voy de bar en bar siempre que puedo escuchando a músicos de esta región. Siempre me ha gustado la música en directo e intento asistir, cuando la policía no aparece en el local de turno para echarnos, a escuchar buena música. Llevo años esperando un gran concierto en esta ciudad. Veo como en Gijón, Oviedo, Santiago de Compostela, La Coruña, Valladolid, San Sebastián (ciudades como la nuestra), van artistas de primer nivel internacional. Aquí el concierto más importante de esta Semana Grande ha sido Miguel Bosé y como concierto estelar Joaquín Sabina. No niego que haya gente que les guste estos conciertos, a mi me gustan, y no niego que tengan su público, porque hay que tener variedad, pero no. Sinceramente, en estas Fiestas, y las cosa como son, he sido el primero en reconocer que se ha hecho un esfuerzo y se ha traído música variada, en estos tiempos de crisis se han hecho unas fiestas muy dignas (seguramente aquí habrá opiniones para todos los gustos, y aunque me esté pasando de bondadoso, aquí lo dejo escrito). Pero tan difícil es traer a los Rolling, Madonna, U2… Si nadie dice que sea gratis, pero tan difícil es convencer a uno de estos artistas para que vengan a tocar aquí… pues debe ser que si porque lo mejor que ha venido a Santander ha sido Julio Iglesias y Joe Cooker, eso sí, hace 20 años. Me diréis que no hay sitio, que no hay nadie que se atreva a jugarse dinero de su bolsillo para que luego salga mal, me diréis que aquí llueve… Vale, vale, ya conozco todas esas excusas, no pongamos ningún remedio, dejemos la imaginación aparcada y sigamos trayendo a Miguel Bosé…
La cultura es difícil de definir, para unos tiene que ser elitista, para otros trasgresora, para unos debe ser accesible a todo el mundo, en cambio otros piensan que debe ser para gente con dinero. Yo creo que la cultura debe englobar todo acontecimiento artístico, todo aquello que salga del alma de un artista, nos guste o no, la entendamos o no. Si algo positivo encuentro a que Santander haya presentado su candidatura a ciudad cultural es que desde hace unos meses para acá algo ha cambiado, por fin en esta ciudad ha habido vida en las calles, se ha respirado ambiente de artistas. La gente ha salido de sus casas para disfrutar al aire libre o en sitios cerrados de música, teatro, danza, pintura, malabares, magia... muchísimas actividades. Sólo espero que esa gota de esperanza no se la lleven con la excusa de haber perdido este tren, no quiero una ciudad oscura, triste, quiero una ciudad dinámica y alegre. Ya no somos Santander candidata a ciudad cultural de 2016, pero espero que a partir de ahora seamos, Santander Capital Cultural.
V Ryder Cup de la Asociación
Hace 12 años